Hay que remontarse a 1994 para recoger las primeras sesiones de Ángel Lozano en salas de Granada como Espacio Abierto, Factoría, Gótico, Berlín... Ha pinchado el Festival Granada en Off 2011 y en míticos pubs como Peatón o Tornado. En la actualidad es habitual en la cabina de Planta Baja y como residente en Polaroid Club, sala que regenta.
Sus sesiones fluctúan entre ambientes Nickcavelianos, repeticiones Alanvegescas, riffs Fuzztonianos, delicadezas Smitherianas y píldoras Curativas que se suceden sin tregua para dejar sin oxígeno a toda persona que se atreva a pisar la pista de baile.