Daniel Lopatin, el hombre tras el extraño alias de Oneohtrix Point Never, sigue avanzando a pasos agigantados dentro de su propio mundo. Tras la excelente acogida general “R Plus Seven” en 2013, el productor norteamericano de origen ruso publica “Garden of Delete”, su segundo disco para Warp, aún más arriesgado y ambicioso que el anterior.
Oneohtrix Point Never empezó con el objetivo de explorar los sonidos de su infancia y adolescencia y trasladarlos al ámbito de la creación digital y la electrónica visionaria. De entre todo su arsenal de instrumentos, los más importantes probablemente sean, de un lado, un sintetizador antiguo de su padre que ha utilizado en la mayoría de sus obras, y, por el otro –y más importante– su ilimitada imaginación. Aunque ya había grabado un buen puñado de discos entre 2007 y 2009 (en parte reunidos en el recopilatorio “Rifts”), el reconocimiento le empezaría a llegar con “Returnal”, publicado en 2010 en Editions Mego, y más tarde, con dos obras fundamentales de la electrónica contemporánea, “Replica” (del 2011, editado en su propio sello, Software Records), y “R Plus Seven”, ya en Warp. “Garden of Delete” es otra muesca más en una discografía que supone sin duda uno de los corpus de trabajo más originales, expansivos y estimulantes de los últimos años.