Javier Colis no necesita presentación. A estas alturas hablar de la figura de Javier Colis es referirse a un compositor y guitarrista extraordinario que estuvo presente en los proyectos más interesantes de aquella escena que arrancó a finales de los ‘80 y tuvo continuidad en los ‘90 con nombres como Demonios Tus Ojos, Vamos A Morir, y sobre todo aquel añorado combo, Mil Dolores Pequeños. Poseedor de uno de esos sonidos inimitables, bien sea a la voz o a la guitarra, Javier Colis asegura siempre una personal y muy interesante experimentación y prospección de los límites sonoros y la poética. El riojano es uno de los músicos nacionales más coherentes y estimulantes de la escena pop–rock .
"No habrá ninguna revolución porque nunca la creíste necesaria". Con esta rotunda sentencia sintetizan los barceloneses Catástrofe Club su espectáculo "Galletas" (Molusco Discos, 2015), que denuncia al espectador por su profunda pasividad ante todo aquello que está aconteciendo en la sociedad actual. En lo musical, el pop y la electrónica se unen con sonidos y formas del punk, el post-rock o el kraut. Bases secuenciadas, bajos reiterantes, guitarras eléctricas y voces melódicas y filtradas se combinan a partes iguales configurando un contundente arsenal de canciones de tensión contenida. Todo ello siempre al servicio de un mensaje y unas letras que, según ellos mismos afirman, son la esencia de Catástrofe Club. Imágenes en blanco y negro y multitud de iconos perturbadores convierten el concierto en un inquietante descenso al particular universo de Catástrofe Club, conjugando sentido de la tragedia con cierto humor, sin dejar a ningún espectador indiferente.