El artista contemporáneo Ibon Aranberri repasa sus últimos años de trayectoria en "Organigrama", en la Fundación Tàpies, una obra formada por series que conciben el paisaje como centro de ideología y expresión del sujeto social.
Los territorios y experiencias no identificables de las fotografías interactúan con los territorios de las otras obras, mutan y se desarrollan de la misma manera que lo hace la materia en las esculturas, creando a la vez una sensación de vacío de imagen y de totalidad.